Pasen y vean.

Leer, es la única manera de viajar a través del cerebro de otro sin empringarse de sangre, y sin peligro de que a uno le detengan por asesinato. En este modesto blog, mi propósito es invitarles a un alegre viaje por un sitio nunca visto y que, según opiniones expertas, aún así sigue sin encontrarse, es decir: mi cerebro.

Como verán a través de las diferentes entregas, se trata de un sitio muy especial. A veces desordenado, a veces rígido, a veces histérico, a veces calmoso, a veces lleno de ruido, otras muy tranquilo, y a veces algo surrealista. Pero siempre acogedor y sorprendente. Si lo sabré yo, que vivo en él hace años. Así que agárrense a las butacas, contengan el aliento, fírmenme esta bobadita titulada "consentimiento y exención de toda responsabilidad", y prepárense, que comenzamos.